En mi vida pasé por muchas modas, y la mayoría quedaron en el camino. Los cortes, los colores, los estampados… todo cambia. Pero si algo aprendí es que la única tendencia que realmente vale la pena es ser una misma. 🌸
Hoy, desde mi rol de mujer y de líder en una empresa argentina, sé que no es fácil. La falta de tiempo personal, la presión de sostener un equipo, las decisiones de todos los días… todo eso te puede arrastrar. Y ahí es donde la ropa se convierte en algo más que ropa: se convierte en un recordatorio de quién soy y de cómo quiero caminar cada día.
Inspiración en viajes y sueños
Cuando viajo, observo mucho. En España y en Italia descubrí mujeres que se visten con una naturalidad que me inspira: cómodas, seguras, con esa mezcla entre lo simple y lo elegante. Eso me enseñó que la autenticidad no depende de lo que usás, sino de cómo lo llevás.
Me quedan pendientes destinos que sueño conocer: Marruecos con sus colores intensos, India con su misticismo, Bali con su calma. Sé que esos viajes me van a traer nuevas ideas, nuevas texturas, nuevas formas de acompañarlas.
La colección como espejo
En esta colección Be You! busqué prendas que acompañen en la vida real:
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Vestidos que liberan, no que aprietan.
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Blusas que sirven para todo el día, de la oficina a una salida con amigas.
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Pantalones que te sostienen, que no te hacen sentir disfrazada sino más segura.